Rebeldía de aquellas que han transformado el conocimiento: “Yo no quiero ser esa que dice mi papá”

“Nosotras también somos científicas”, resaltaron

La vocación de las mujeres no es quedarse en casa a lavar trastes, es ser reconocidas por los descubrimientos que sólo existen cuando un hombre los comenta  

Por Karla Marsori (FES Aragón)

El pasado martes 11 de febrero, se llevó a cabo la plática: «Conoce la historia de las mujeres dentro de la ciencia», con la participación de la Dra. Areli Montes Pérez, para inaugurar la jornada conmemorativa por el Día Internacional de las Niñas y Mujeres en las Ciencias de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán.

La rebeldía de aquellas que han transformado el conocimiento no puede quedar en el rezago y es por ese motivo que, a través de sus historias de vida, otras pueden inspirarse para incursionar en las ciencias. En esta ocasión, la Dra. Areli Montes nos compartió su trayectoria para mostrar que pese a múltiples dificultades logró convertirse en un referente dentro de la Física Aplicada en México.

Con complicaciones desde su núcleo familiar, la Dra. Areli Montes creció rodeada de discursos como “las mujeres no estudian”, “¿para qué estudia una mujer?” “No estudies, al rato te voy a ver con 3 o 4 hijos y vas a ir al campo a dejarle el almuerzo al marido”; sin embargo, la Dra. Areli Montes tenía muy clara una cosa “yo no quiero ser esa que dice mi papá”.

Una de las razones por las que se encuentra menor número de mujeres en las matrículas de ciencias exactas va de la mano con los pensamientos sociales y la crianza familiar. En el caso de la Dra. Areli Montes, los comentarios desalentadores y complicaciones no los encontró solo en casa. “Las mujeres entran aquí para cazar hombres”, eran los constantes argumentos de un compañero de licenciatura que dejaba ver el dominio del pensamiento patriarcal en su desarrollo como profesional.

De acuerdo con registros del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), se estima que en 2022 la cifra marcaba a casi un millón y medio de personas estudiando una carrera en ciencias, ingeniería, matemáticas y tecnología, tan sólo el 33.17% eran mujeres.

 No sólo es un tema del número de matrícula femenina en las licenciaturas de ciencias, se trata de una transformación social y de pensamiento individual, que como bien se plantea en la plática, es necesario erradicar para poder tener mejores resultados y menos violencia hacia las estudiantes a la hora de elegir la carrera de sus sueños, pues podría convertirse en su peor pesadilla por culpa de la ignorancia.

 La Dra. Areli Montes Pérez, finalizó su experiencia haciendo un llamado a los profesores para fomentar las vocaciones en sus alumnas, mencionando que, aunque es difícil ser mujer en un espacio liderado por hombres, no es imposible la unión de aquellas que han sido invisibilizadas a causa de los pensamientos de inferioridad machista.

 

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