«Gran Fury o cuando el arte irrumpe»

Por: Beatriz Calva Fuente:

Fuente: Gaceta FES ARAGÓN

El Museo Nacional del Chopo inauguró la exposición “Gran Fury: el arte no es suficiente”, con la presencia de John Lindell y Loring McAlpin, representantes de los colectivos Gran Fury/ACT UP; y André Mesquita, curador en el Museo de Arte de São Paulo (MASP), Brasil. Diversas fotografías y carteles dan un vistazo a la conjunción entre arte y política de finales del siglo XX.
 
La exposición es un referente en estrategias propagandísticas para artistas de la comunidad lesbiana, gay, bisexual, transgénero, travesti, transexual, intersexual, queer y asexual (LGBTTTIQA+); además, enfatiza en el potencial del arte para despertar la conciencia colectiva. Lindell y McAlpin recordaron los esfuerzos iniciales para financiar su proyecto, basados en la venta de camisetas y carteles, así como el apoyo de instituciones de arte público.
 
Parte del material fue desarrollado por la agrupación ACT UP, traducido como “portarse mal” o “hacer de las suyas”, acrónimo de AIDS Coalition to Unleash Power (coalición del SIDA para desatar el poder). La asociación surgió en Nueva York, Estados Unidos, como una denuncia de la negligencia de las autoridades ante la emergencia sanitaria del síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA), la cual pronto se tornó en protesta política a causa de los dudosos tratamientos experimentales de la enfermedad y el desarrollo de medicamentos.
 
Gran Fury (gran furia) toma su nombre del modelo automovilístico usado por la policía neoyorquina en aquel entonces (Plymouth Gran Fury). La propuesta tuvo el objetivo de enfrentar especialmente a las instituciones catolicas y sus señalamientos hacia las “victimas culpables”, es decir, personas merecedoras de la infección con el Virus de Inmunodeficiencia Adquirida (VIH) debido a sus prácticas inmorales; asimismo, se denunciaron las políticas públicas discriminatorias hacia los portadores de SIDA, en particular de hombres homosexuales. “El racismo persiste y los medicamentos no son accesibles para grupos marginalizados, como las mujeres y personas de raza negra”, comentó McAlpin. Además, “el tema ha dejado de ser prioridad; hay menos activismo en el arte”, consideró Lindell.
 
Previo a su presentación en la Ciudad de México, la muestra fue alojada en el MASP, en Brasil, bajo la curaduría de André Mesquita, investigador de arte y derechos humanos. Gran Fury abrió el ciclo de exposiciones en 2024, la idea fue generar discusión entre el público asistente. “No tuvimos que esperar al 1.o de diciembre, Día Mundial de la Lucha contra el SIDA. Recibimos testimonios y relatos de la comunidad, contando el día a día contra la enfermedad”, concluyó Mesquita.
 
La exposición busca provocar el debate colectivo e impactar a las nuevas generaciones. “Gran Fury: el arte no es suficiente” estará abierta al público hasta el 1 de diciembre de 2024.