Fuentes: Gaceta UNAM

Por: leonardo Frías Cienfuegos

Justo cuando se conmemoró el día de la lucha contra el cáncer de mama (19 de octubre), la Comisión Interna para la Igualdad de Género (CInIG) de la Secretaría Administrativa convocó a la comunidad universitaria a una charla especializada para sensibilizarla sobre esta problemática de salud que atañe a todos los círculos sociales.

Jorge Adán Alegría Baños, oncólogo clínico y académico de la Facultad de Medicina (FM), expuso que en México desde el año 2020 el cáncer de mama ha repuntado su incidencia, mas no su mortalidad, aun cuando cifras citadas por el también profesor del Departamento de Embriología y Genética de la FM indican que en 2022 fallecieron 21 personas por esta causa cada 24 horas.

“El año pasado hubo más de 23,000 casos, y más de 7,800 muertes; pero la neoplasia con mayor mortalidad sigue siendo el cáncer de pulmón”, explicó.

Ante Luis Álvarez Icaza Longoria, secretario administrativo, que fungió como anfitrión en el auditorio del piso 3 de la Torre de Rectoría –y quien señaló que según la Organización Mundial de la Salud cada 30 segundos se diagnostica un caso en el planeta–, Jorge Alegría atribuyó este fenómeno a que cada vez hay más herramientas para su búsqueda y detección.

“Debe tenerse en cuenta que el cáncer es un conjunto heterogéneo de aproximadamente 250 enfermedades, que se propaga a través de la sangre, que no todos los tumores son cancerígenos; pero se trata de un padecimiento complejo que incluye al cuerpo, la mente y el espíritu, así como al entorno y la economía.”

El mayor factor de riesgo ante el cáncer de mama es ser mujer, determinó el especialista. “Por cada 100 mujeres sólo un hombre lo padece”, dijo.

No obstante, precisó que aunque hay factores no modificables, como las mutaciones genéticas y los antecedentes familiares, existen otros transformables, entre ellos el sobrepeso, la ingesta de anticonceptivos orales, la hipertensión, la diabetes, incluyendo el consumo de alcohol y tabaco.

Existen múltiples consejos y sugerencias para evitarlo, aseguró, pero de lo único que se tiene evidencia es realizar una dieta a base de vegetales, ejercer la lactancia (si es el caso), el consumo de fibra, así como la actividad física recreativa y la exposición solar.

“El cáncer no se puede evitar, pero sí es posible prevenirlo. Son conceptos diferentes, el segundo es preparar, advertir, informar”, destacó.

El especialista de la FM dejó en claro que en el caso del cáncer de mama no siempre se trata de un tumor voluminoso. “Por ello se insiste en las revisiones periódicas: si la piel duele, aunque no sea necesariamente un bulto, o se agrieta, eso requiere atención médica”, concluyó.