«“Todos aspiramos a llegar a un club así”»

La puertorriqueña se ha consolidado como una de las piezas clave del equipo en su primer torneo como azul y oro

Por: Horacio Alvarado.

Fuente: Gaceta UNAM

Foto: Club Universidad Nacional.

Las calles de Puerto Rico fueron la escenografía para conocer a su gran amor, el cual se ha convertido en su estilo de vida. El futbol, desde su niñez y hasta el profesionalismo, la ha acompañado en diferentes partes del mundo. Hoy se ha consolidado como una de las piezas claves de Pumas, en su primer torneo como azul y oro.

“Todos aspiramos a llegar a un club así”, dice Cristina Torres, la puertorriqueña que juega en el Club Universidad Nacional.

“Todo ha sido fantásico en Pumas. Uno llega y te reciben de manera cálida. Te hacen sentir como si llevaras toda la vida aquí, cuando apenas acabas de llegar. Yo llevo aquí sólo unos meses, pero la institución y su gente me han arropado y me han hecho sentir parte de una familia. No quiero estar en otro sitio que no sea Pumas”, afirmó la defensora auriazul, que se siente agradecida por pertenecer a este equipo.

Durante su infancia, los primeros acercamientos de Cristina al futbol fueron a los cuatro años, en su pueblo natal en Puerto Rico. “Yo tuve una infancia muy bonita. Recuerdo que jugaba futbol con mis hermanos y mis primos en las paredes de la casa. En la escuela, durante la hora de recreo, me iba con los niños a jugar al patio. Siempre he sido la que juega futbol. Ése es mi estilo de vida, soy afortunada de tener una familia muy bonita que me apoya desde siempre”.

Cristina Torres jugó varios años en una academia, pero su vida profesional comenzó a perfilarse cuando recibió su primer llamado a las categorías juveniles de la selección femenil de Puerto Rico. “Cuando crecí, no me imaginaba jugar al futbol porque en ese entonces no existían equipos de mujeres. Nunca tuve la referencia de querer ser futbolista profesional”.

Siempre ha sido disciplinada y el deporte lo tomaba con mucha seriedad. “Soy muy apasionada, lo que me ha motivado a darle importancia al futbol. La oportunidad de ser jugadora profesional se la debo a un entrenador de Puerto Rico, quien me ayudó a pelear por mi sueño. Mucha gente me ha apoyado para cumplirlo”, afirmó.

La vitrina que significó jugar en su selección le ayudó a salir al extranjero, ya que fichó para el Espoir Club Bastiais, en Francia. Posteriormente jugó para el Detroit City y el St. Bonaventure University, equipos que pertenecen a la United Women’s Soccer de Estados Unidos. A la par, pudo cursar una licenciatura y una maestría en las universidades de Indiana y de Nueva York, en Estados Unidos.

“La experiencia fuera de mi país no fue difícil para mí; en realidad, no me costó salir de mi casa en Puerto Rico. Siempre he sido independiente, no me molesta estar sola para perseguir algo que quiero. Sé que muchas personas me respaldan en este camino. Mis experiencias en Francia y Estados Unidos me ayudaron a madurar más. Una se debe adaptar al lugar al que va porque el lugar nunca se adaptará a una”.

Sus papás le inculcaron desde niña que debía estudiar e ir a la universidad. “Luego de terminar la Escuela Superior en Puerto Rico estudié hotelería y manejo de empresas en la Universidad de Indiana. Luego hice una maestría en contabilidad en la ciudad de Nueva York”, expresó Torres.

Después de graduarse académicamente en Estados Unidos, Cristina tuvo un primer acercamiento con la Liga MX Femenil al jugar para el Mazatlán. Incluso recuerda cuando enfrentó a Pumas siendo parte del club sinaloense.

“Conocía a Pumas desde antes porque es una institución muy respetable y un club muy conocido en el ámbito mundial. Cuando me enfrentaba a Pumas, siempre fue un equipo ordenado y aguerrido. Sabíamos que teníamos que ir a pelear porque sus jugadoras no dejarían de hacerlo hasta el último minuto”.

Para el inicio de este Apertura 2024, el equipo que dirige Marcelo Frigério contrató a Cristina Torres. Pocas jornadas más tarde, ella se afianzaría como defensora central, una posición que no esperaba, pero a la cual se adaptó desde el principio. “Llegar a Pumas fue algo increíble. No encuentro las palabras para expresar mi emoción. Lloré al firmar mi contrato. Ser parte de esta institución es un honor muy grande. Todos aspiramos a llegar a un club como éste. Fue felicidad pura”.

La afición es una de las principales motivaciones de Cristina Torres, ya que ha sentido el respaldo de la gente universitaria desde su llegada a la institución.

El futuro es claro para ella. Sus dos máximos sueños son conseguir un campeonato con Pumas y jugar la Copa del Mundo con Puerto Rico, selección que no ha participado aún en estos certámenes.