DCV realiza encuentro para fomentar la diversidad

A través de múltiples actividades, profesores del Departamento de Diseño y Comunicación Visual a Distancia y Presencial, convocaron a la “Semana de las diversidades”, abriendo espacios recreativos, de reflexión y diálogo en torno a las pluralidades sexogenéricas.

Para dar paso al programa, el Taller de Maquillaje Drag se impartió en el Foro de TV, a cargo del estudiante de la FES Aragón, Rafael Kapoor, quien también es planificador agropecuario y transformista  drag king. También, da vida a Proyecto RK Ultra, un personaje de estilo urbano que disfruta de los sonideros y la vida en el barrio.

A este sitio acudió la comunidad interesada en la creatividad del arte drag, presentándose con brochas y maquillaje para hacer de su rostro un lienzo, cubriendo las cejas con pegamento, sellando con talco, aplicando base, jugando con colores vibrantes y la estructura exagerada de los rasgos faciales como las cejas, ojos y labios. Así, los universitarios aprendieron las mejores técnicas del maquillaje transformista.

Con el ciclo “Cine DiversidadES”, se apreció a través del séptimo arte la representación de realidades y experiencias de las comunidades LGBTIQ+ a lo largo del tiempo y en diferentes contextos socioculturales. Historias trans, con “La chica danesa”, del director Tom Hooper; “Todo sobre mi madre”, de Pedro Almodóvar,  y “Estrellas solitarias”, de Fernando Urdapilleta, así como relatos de amor sáfico, con “Retrato de una mujer en llamas”, de la directora Céline Sciamma.

En otro momento, con un auditorio lleno, el Ágora de Diseño fue sede para la presentación de una serie de cortometrajes titulados “Documentales de la Diversidad”, realizados por estudiantes del “Colectivo Estudiantil de Producción Audiovisual Anti-documental”, dirigidos por el maestro Saulo Blanco García, profesor de la Facultad; estas producciones fueron protagonizadas por alumnos de la licenciatura de la modalidad a distancia.

Como parte de la bienvenida al recinto, la licenciada Erika Robledo Ramírez, jefa de la Sección de Diseño y Comunicación Visual a Distancia, agradeció la presencia y el interés de los asistentes, mencionando que el objetivo de la actividad con relación a la representación de las identidades sociales de género fue mostrar y entender algunos conceptos que para ciertas personas pueden ser confusos.

“Soy un chico trans”, fueron las palabras que acompañaron el primer cortometraje,  en el que presentaron al alumno de sexto semestre, Chai, quien resignificó este nombre en su persona, pues la combinación de elementos amargos, especias picantes mezcladas con la calidez de la leche fueron la composición exótica con la que se identificó, apropiándose de su nombre antes de su transición.

En el corto, el alumno habló del apoyo que le brindó una clínica especializada, donde lo orientaron con sus pruebas y el inicio de su tratamiento de retraso hormonal. Con una transición paulatina señaló que el trato social ha sido diferente, pues con una apariencia más masculina le han otorgado un falso sentido de superioridad por ser hombre.

En cuanto a su vida académica, relató que no todos los profesores y compañeros han respetado su identidad y han realizado comentarios fuera de lugar, aun estando en Modalidad a Distancia; no obstante, otros docentes le han mostrado su aprecio y apoyo.

En otro cortometraje, Índigo, una alumna trans de cuarto semestre, mencionó que su identidad siempre fue algo claro para ella, aunque no sabía cómo explicarlo. Con el tiempo comenzó a entender su sexualidad, paso a paso experimentó con sus pronombres y realizó una búsqueda de las cosas con las que se sentía más cómoda, llegando al punto en el que comprendió su identidad.

Respecto a su proceso legal, subrayó que fue sencillo y accesible, pues a pesar de la idea que se tiene de los procedimientos burocráticos, la institución que la atendió tiene el objetivo de agilizar los procesos de reconocimiento. “Después de un poco más de dos años en reemplazo de terapia hormonal, estoy muy feliz siendo la persona que soy y me siento muy cómoda siendo yo”, afirmó.

Ese sentir también es parte del apoyo incondicional de su familia, que ha sido crucial durante su transición, al hacerla sentir cómoda en todo momento. Del mismo modo, enfatizó que sus amigos han sido su respaldo en su entorno académico, pues al tener conocimientos sobre temas de diversidad la han hecho sentir segura.

A lo que Chai respondió que una razón podría ser los estereotipos que siguen marcados en la sociedad, aunque existen otros espacios en los que se ven realidades diferentes que no se encuentran sujetas con esos ideales arraigados. Destacó que crecer en sitios rodeados de arte es una fortuna y que, como diseñadores, el conocimiento que se brinda en las aulas les permite moldear y transformar la realidad.

“Estoy construyendo una obra de arte de mi cuerpo,  destrozando lo que fue una vez y lo estoy armando como quiero que sea, como es de verdad”, añadió.

Continuando con la plática, abordaron los dilemas que se encuentran en torno al uso del lenguaje inclusivo, coincidiendo en la importancia de utilizar un sistema no binario para asegurar que las identidades no sean excluidas, ya que apropiarse éste reconoce, respeta y visibiliza a todas las personas.

En su participación, el alumno Eber hizo hincapié en la responsabilidad que como diseñadores tienen al contar historias a través del arte, crear narrativas que muestren y normalicen las vivencias de la comunidad LGBT+, promoviendo una comprensión de los temas relacionados con la diversidad sexual y de género, para lograr una sociedad más respetuosa.

Por parte del público, se aludió a las actitudes reactivas que aún siguen teniendo ciertos grupos sociales frente a las personas que asumen expresiones, orientaciones e identidades sexuales diferentes, estableciendo la importancia de crear espacios seguros dentro de la comunidad para cuidarse de la intolerancia y los prejuicios, incluso estando en la Facultad.

Así mismo, reconocieron que la complejidad de las experiencias relacionadas con el sexo y el género no es algo cerrado que se tenga que ajustar a sistemas binarios o a categorías ya instauradas, comprendiendo que la diversidad es fluida y permite a cada individuo explorar y experimentar libremente otras formas de vivir.

Al término del conversatorio se proyectó un breve documental sobre el concurso “Universidrag 2.0 de la UNAM”, efectuado en el Foro Experimental José Luis Ibáñez de la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL), donde se reconocio la cultura drag como parte de la Universidad, exhibiendo atuendos únicos y presentaciones llenas de creatividad, energía y originalidad.  Finalmente, las actividades terminaron con la proyección de “Casa Roshell”, de la directora Camila José Donoso y “Quebranto”, del director Roberto Fiesco.