El teatro tiene que alzar la voz ante la violencia de género

Una historia de acción y sororidad, que deriva en una propuesta escénica en favor de la compasión y la empatía, es la obra de teatro Las desafortunadas. Normalización del absurdo, protagonizada por Tania González Jordán, profesora de tiempo completo en el área de técnica vocal y expresión verbal del Centro Universitario de Teatro (CUT).

“La obra plantea una situación extrema que nos tiene avasalladas. De manera personal me siento tremendamente sacudida por esta violencia de género que es una realidad constante”, expresó en entrevista la actriz e investigadora con más de 28 años de trayectoria, también integrante del Claustro de Maestros del Centro de Estudios para el Uso de la Voz (Ceuvoz) y certificada como Designated Teacher del Centro Kristin Linklater de Escocia.

En esta oportunidad encarna a Teresa, progenitora de una chica que ha sido desaparecida, por lo que se ve obligada a emprender todo un calvario para dar con su paradero. En esta penosa travesía se encuentra con otra madre de familia, de nombre Alma (Susana Ugalde), a quien le han arrebatado a una de sus hijas, víctima de feminicidio.

Juntas, agregó, se transforman en algo más que dos mujeres profundamente afectadas, al decidirse por encontrar justicia también para otras madres que padecen una situación similar. “No se sienten solas, se van acompañando unas a otras. Ambas se vuelven guías y activistas”.

Teresa y Alma resisten en una espera inacabable para obtener algún indicio de justicia. En este viacrucis van tejiendo una trama de acción y solidaridad. “Entre ellas se va generando una amistad de mucho amor, acompañamiento y sororidad. La apuesta es por la compasión y la empatía. Con Las desafortunadas pretendemos darle voz a estas mujeres agraviadas, que se tome conciencia como sociedad de que se trata de una muy compleja problemática que nos compete a todos, y no únicamente a quienes han sido víctimas y a sus familiares”, comentó.

La puesta en escena forma parte de una trilogía, Ensayos sobre la feminidad, que se completará con los montajes de Grávidas y Las afortunadas, todas ellas producidas por Teatro en Fuga A. C. y el Centro de Exploración y Pensamiento Crítico (CEX).

Esta problemática, continuó González Jordán, tiene sus raíces en las pequeñas violencias de la vida cotidiana, por lo que es necesario un montaje donde se escuchen estas voces y se hable del tema en todos los ámbitos.

“Es urgente alzar la voz desde nuestra trinchera que es el arte teatral. Quienes vayan a ver la obra se darán cuenta cómo es que estas mujeres en su dolor toman fortaleza para vivir amorosamente y mantener intacto el recuerdo de sus hijas, y cómo lo hacen desde el amor. El Ministerio Público es el lugar en el que ellas se ubican la mayor parte del tiempo, es ahí donde empiezan a platicar, se reconocen y se compadecen la una de la otra, sin que esto último tenga una connotación de lástima”.

Trabajo vocal

Sobre la propuesta escénica, Tania González explicó que se apela sobre todo al trabajo actoral. “La directora, Olga González, ha sido muy cuidadosa en que lo que se ve y dice sea lo más importante, aquello que resalte en un espacio pequeño, íntimo”.

Como especialista en el uso de la voz en el escenario, considera que el trabajo vocal es fundamental, sobre todo cuando actores y actrices permanecen a la vista del público durante toda la obra. “La metodología que utilizo da cabida a la conexión de la voz con la imaginación y el cuerpo. Cualquier sesgo de superficialidad o de artificio desarma un poco la propuesta escénica”, advierte.

Para quienes participan en la pieza abordar el tema del feminicidio es traerlo al universo de la ficción, “con la intención de impactar sensorialmente al espectador e inocular en éste un germen de cambio”. Tania González sugiere recordarle al público que el teatro también es un lugar de encuentro, y que sus hacedores tienen la responsabilidad de que éste asista a las funciones porque se interesa por las temáticas y propuestas estéticas que se le presenten, “aunque éstas no respondan a una realidad agradable”.

El proyecto de la trilogía de Ensayos sobre la feminidad, de la dramaturga Paulina Barros Reyes Retana, inicia presentaciones en la Caja Negra del CEX, ubicada en avenida Revolución 1291, los días 23, 24, 30 y 31 de marzo a las 20 horas. Posteriormente, la compañía estrenará Grávidas en julio y Las afortunadas en noviembre.